RIO BRANCO SE MUERE

Río Branco se muere. Veamos los elementos del escudo que resaltan al ojo desnudo sin medias palabras. El escudo fue ideado y realizado por el periodista Bernardo Pilatti Fernández. Se inauguró en el Arco de Entrada a la ciudad, el 15 de febrero de 1992, dentro de los festejos por los 200 años de fundación de la Villa de Arredondo, hoy ciudad de Río Branco. 1 El sol Naciendo y poniéndose, graficado en amarillo y rojo. 2 El puente con sus aduanas simbolizando la zona, la frontera y el empoderamiento para ambas regiones. 3 Río Branco, referencia al nombre de la localidad y un escudo dividido en tres imágenes que representan tres grandes potencialidades regionales. A- Una planta de molino o secadores de granos, simbolizando a la producción de arroz, con un sol poniente como símbolo de trabajo nocturno y descanso de jornada, simbolizando la producción agrícola. B- Una playa en pleno disfrute de verano en referencia a Lago Merín. C- Una vaca en un campo en referencia a una prosperidad ganadera y lechera en la zona. 4 Dos manos en actitud de amistad o compromiso, simbolizando la paz, el negocio y que las mangas respectivas tienen formas de libros. A la derecha un libro negro de hojas blancas, que puede representar a la Biblia o la Constitución de derechos y a la izquierda, un libro de color verde de hojas amarillas, que puede simbolizar la Constitución de la frontera, referencial a Brasil en su acto de manos dadas en hermandad o un manual de cooperativismo, ya que sus colores dan referencia posible. Cierra una cinta con la palabra Integración y Desarrollo, teniendo en sus puntas un árbol posiblemente frutal y a la izquierda, uno posiblemente común. En la fecha, este escudo no es muy utilizado porque representa un sector que desaparece a pasos agigantados. Representaba en una época distante, a una ciudad próspera en trabajo y que tenía todo para seguir creciendo. Hoy, Río Branco es una cuadra de juego político donde el poco dinero que entra, es repartido muchas veces, en partes desiguales y a intereses por un nombre o status de alguien a punto de querer solicitar a futuro, una estatua de trecientos metro de alto, sobre el río a 500m del puente Mauá. Considero que el amor a la ciudad o el deber de querer hacer por el crecimiento sociocultural de toda la comuna, está superficialmente estampado, sobre un tremendo manual de egoísmo e interés personal, más que partidario. Se ha tomado a la población como un puñado de ignorantes, pedigüeños que se pueden manipular o comprar, usando de su vulnerabilidad socioeconómica, con palabras maquilladas, manipuladas y llenas de un veneno que a futuro, traerán la desgracia para todos. Es un acto jodido y motivo de grande tristeza el dar y/o prometer a cambio de (X). Es una deshonra ciudadana y un final de caos absoluto, someterse y concordar, apoyar o defender a todo hecho político o no, que requiera de un pago previo, por un beneficio prometido, que tenga como finalidad la supresión de un derecho propio. Es el simple hecho de decidir bajo criterios propios sin estar condicionado a promesas o acuerdos. Es por ésta razón que todo ciudadano que quiere hacer algo en pro al crecimiento de Río Branco, lo hace sin esperar nada a cambio, como le salga y a la medida que tiene. Pero es de profundo pesar que tras los telones del gran teatro en campaña, al avance de la ciudad en términos políticos, las promesas y tips de competencia, sean tan reveladores que sí la luz del Sol, fuera controlada por alguno, hoy seríamos rehenes de sus caprichos y voluntades, para poder tener un rayo de sol en el hogar. Es lamentable que tal ejemplo, se un pantallazo de lo que se viene, cuando se les ocurra al sistema de recaudación, implementar un impuesto al oxígeno terrestre. Porque tales acuerdos en circunstancias que ponen al pueblo y los dirigentes en un banco de referencia condicionada en un “Sí tal cosa haces, tales cosas hago por los tuyos”, generando una puerta de encierre con carácter obligatorio y con un final de penalidad al hecho de negarse. Es de mentes así, que proyectan y arquitectan dentro del sistema político, la caída y los baches económicos que afectan al pueblo a toda una nación en el futuro. Porque un sistema político lleno de Verdad, de funcionarios comprometidos con su labor de hacer una Nación próspera, actúa con justicia, produciendo hechos que sean tal como la luz del Sol, que nace para todos por igual. ¿Acaso el Sol a condicionado a alguno su luz?. Río Branco muere, y no lo mata el sistema político, lo mata el engaño de algunas personas que con actos políticos distorsionados, llevan a las masas al voto, creyendo que todo será mejor y cae de maduro que cuando la ofrenda es grande, hasta el santo desconfía, que a mayores ruegos, más terrible es el pecado. No es el Río Branco de ahora el que va a sufrir, es el Río Branco del mañana, que seguirá hundido en la repetición de hechos maquillados y de papeleos fantásticos que se hacen eco en los oídos de los abuelos y nuestros padres. Es de situaciones como éstas que hacen que perdamos la fe y la esperanza de tener una ciudad próspera. Pues si nos mentimos los unos a los otros y nos volvemos egoístas y oportunistas, ¿Qué trabajo de ejemplo vamos a dejarles para inspiración a los jóvenes del futuro?. Las promesas salen en épocas de elecciones únicamente, nunca fuera de ellas. Al parecer las ideas y proyectos solo surgen cuando la Corte habilita. Daimer Santuche H.