Exhibicionismo, el fantasma de tuenvidia!!

Hoy tengo ganas de ser un facista común, estoy subiendo esta selfie vanidosa para mostrar mis lentes nuevos, la marca más famosa del mercado y comprado en el más caro lugar.

- Alguna vez te preguntaste o hiciste esto con tu imagen?
Es nada más que una forma de identificarnos en un instinto puramente animal y estúpido. Y digo esto porque todo lo que se posta o se muestra, está al alcance de todos. Unos lo logran y otros no, porque no lo necesitan. Pero muchas veces, el que tiene se pasea exhibiendo su logro. Es como comprar una moto y colocarle la famosa cinta roja contra la envidia. Un total absurdo. Comprarse un celular de marca y fingir que está lleno y no saca más fotos. Andar en un auto ajeno y saludar a quien nunca saludamos. Hacerse el interesante nos transforma en desubicados. Éticamente des elegante. Exhibir un logro puede parecer interesante para quien lo siente, pero hace que alguien sienta rechazo y busque nuestro tropiezo. Caemos muchas veces en el poso consumista y gastamos en lo que no nos edifica como personas. La envidia mata a quien la tiene, envenena tu corazón y luego atrofia tu cerebro. La envidia es socia de los celos y este, primo primero del homicidio. Pariente lejano del suicidio.

Existen personas que aman publicar grandeza ante sus amigos y familiares. Está aquel que cambia el auto cada año, el que compra desmedidamente. Otros, cambian objetos como celulares, muebles, hasta su propia esposa o esposo.

Es como una carrera consumista. Existen muchas personas que les encanta exhibirse desmedidamente, fuera de contexto y dentro, el que está dentro, se desborda y el que está afuera, más afuera queda.

El exhibicionismo es una práctica milenar, El rey Asuero en uno de sus banquetes, quiso deslumbrarse exhibiendo a su esposa, la reina Vasti. La Biblia relata que ella era muy hermosa y el rey envió por ella, para mostrarla a todos los reyes congregados en ese entonces y ella se negó a ir.

Quien exhibe lo que tiene a pedir viene. La falta de humildad es la exageración humilde de la insensatez.

Es totalmente fuera de contexto la exhibición ante las personas que nos conocen y saben de que banco económico familiar, depositamos nuestros conocimientos de ambición.

En una congregación, un joven quiso exhibirse ante todos, demostrando que sabía predicar con profundidad y teología. Al subir, se le cae el borrador que llevaba escondido dentro de su biblia y por no voltearse a tomarlo, de vergüenza ante su plan frustrado, siguió su camino y luego de leer la palabra, no supo predicarla coherentemente. Pues el  borrador era una prédica de otra persona que sí estudiaba la Biblia. En otro lugar, un músico se tiró a lo grande exhibiendo su conocimiento musical y perdió ante un niño de  cinco años que tocaba como un profesional el mismo instrumento.

Una mujer se jactaba  por su belleza y juraba que su marido nunca la dejaría y solamente estuvo casada un año, su esposo la dejó por una fea. Mientras que una señora se jactaba de su fortuna y no disfrutaba de ella ni para comer, pues se racionaba el alimento por no gastar su dinero, en menos de seis años, las empleadas que tuvo, le saquearon la cuenta de ahorro y ella terminó pidiendo comida a los que un día maltrató y corrió de su portón, cuando pedían algo para comer. Ella los mandaba a trabajar como ella, cuando en realidad fue su viudo que la dejó en la cuna de oro. Otro exhibió un celular que acababa de comprar, tirándose de  pudiente ante su amigo, al sacarlo se le cae y no sirvió para más nada sin que al menos lo encendiera.

Una cosa es compartir y otra es exhibir. Ambas se definen en el contexto en que son pronunciadas o exhibidas.

Continuará…

Daimer´s (C)