El misterio de la luna llena

04-04-2015. Estaba yo esa noche deslumbrado con la luna llena, no tenía luz en casa y las persianas de la ventana del cuarto, estaban abiertas. Mientras miraba la luna fijamente, recordaba las historias de que los ratones querían llegar allá por ser ésta de queso. También en las ocasiones de amor e incluso le hice un pedido. Me esforcé por verle las formas y tratar de reconocer al formato de una oreja, el niño Jesús con María y un perrito. Lo cierto es que de pronto me sobresale el corazón y pensé, algo anda mal. La luna es un misterio, el hombre no estuvo en la luna, puesto a que el tiempo de partida y llegada, no coincide con el de salida y regreso. También los cálculos de distancias están mal, la luna tiene más distancia de la que se estima. Los vehículos al parecer, tenían combustibles inacabables y llegaron como quien  se toma un vuelo de Francia a Chile. Siendo que la salida no debería ser mayor que la llegada en tiempo. También pensé, el sol tiene luz amarilla y la luna blanca. Dios!! Algo anda mal, la luna no es un simple meteoro satelital. Dios pudo haberlo creado con los restos del material terrestre que cavó para colocar el cristal húmedo. Sube… me dijo. Te mostraré, tras pasar en un pestanear de ojo la bóveda, estaba sobre una piedra lustrada, es como polvo que cambia de color, me hacía recordar las piedras que brillan en la vía del ferrocarril. Es piedra mágica, pensé. Que fantástico se ve, pero el terror de la inmensidad oscura hizo que se me cayera el espíritu en una terrible sensación de terror. Pensé en mi casa, la linterna, única luz que tenía, hacía que la  pieza se volviera clara cuando la apuntaba a la pared blanca, pero cuando la movía a una mesada de madera, esta absorbía la luz y quedaba oscuro, no se iluminaba la pieza. Entonces me di cuenta, que si la luna fuera una roca oscura, de día veríamos una mancha oscura y no tendría el poder de reflejar  claridad y luz tenue, armoniosa hacia la tierra. Es como un espejo dije- Es más que eso me dijo la voz. Es la que rompe las tinieblas, es el ojo de observación. Aquí descansan los Seres halados de las estrellas. -Estas son sus marcas? –pregunté y no me dijo nada. Y para esa parte oscura, que se ve?- Entonces me tomó y comenzamos a andar rápido. Cuando el sol se hace fuerte, atrae y la lumbrera hace que se desvíe lo que  podría amenazar tu especie. Estamos en constante ronda, y de lejos, tu bóveda es escondida entre el sol y la lumbrera, aún el propio sol se esconde a lo lejos detrás de ella.

-Me dejas en casa? Tengo miedo. Pero si los hombres estuvieron aquí, no veo las cosas que dejaron. –Ellos no estuvieron, solamente dieron vuelta calculando su seguridad de regreso.

 –Entonces, ellos transmitieron un video desde el espacio.

Pero no tuve respuestas, estaba en  mi cama mirando la luna, como ya era alta madrugada cerré y me acosté. Daimer´s ©